Este jueves y viernes más de 43 mil estudiantes de diversos niveles de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) tendrán que enfrentar un paro de labores como producto del emplazamiento a huelga iniciado por los trabajadores administrativos y académicos de la máxima casa de estudios del estado a razón de los adeudos y, en general, la crisis financiera que enfrenta la institución.
De acuerdo con un documento firmado por el rector, son casi 1,700 millones de pesos los que se requieren para realizar un rescate, y pagar los adeudos en nómina, prestaciones, impuestos, pensiones y jubilaciones, deudores diversos y en general la operación de la institución para los cuatro meses que restan del año.
Tan sólo de nómina, para este periodo se necesitarían algo así como 640 millones para el pago de seis mil trabajadores.
En ese mismo documento el rector Gustavo Urquiza Beltrán reconoce que existen varios factores que detonaron la crisis financiera de la UAEM, pero sin duda entre ellos se encuentran la existencia de una plantilla no reconocida por la SEP y la SHCP; prestaciones sindicales tampoco reconocidas por las instituciones que asignan la mayor parte del presupuesto; la inexistencia de un financiamiento de los esquemas de pensiones y jubilaciones; adeudos con el SAT e IMSS y menor flujo de recursos del estado y la Federación.
De no resolverse este problema con una ministración extraordinaria de las autoridades federales, la huelga estallará el próximo lunes como fue emplazada por el Sindicato Independiente de Trabajadores Académicos de la UAEM; pero también se requiere la liberación del presupuesto 2018 retenido por segunda vez a la institución, por la falta de regularización de las condiciones que provocan la crisis.
Esas condiciones van desde la disminución de las nuevas contrataciones, la compactación de las direcciones, los ajustes salariales y la urgente planeación de un esquema de jubilaciones que tiene ya más de 15 años planteándose y que no se ha concretado.
En fin, pareciera que hay en puerta una parálisis más para esta universidad, que, si bien ha generado satisfacciones a Morelos, también ha sido usada como trampolín político de muchos, caja chica o mejor dicho grande de otros; que olvidaron su lema principal y la función social que tiene “Por una humanidad culta”.